La tarifa anual de la inspección técnica del Reino Unido (con un tope de £54,85 durante los últimos 15 años) está bajo escrutinio, y los talleres están divididos sobre si un aumento de precios es necesario o contraproducente. Actualmente se está llevando a cabo una revisión gubernamental, impulsada por una petición de la Asociación de Talleres Independientes (IGA), para determinar si el límite actual refleja los costos comerciales modernos.
Costos crecientes versus presión competitiva
Los talleres argumentan que hace mucho que se necesita un aumento, citando el aumento de los salarios, los costos de los equipos y las estrictas normas de seguridad impuestas por la Agencia de Normas para Conductores y Vehículos (DVSA). Algunos estiman que la tarifa debería estar más cerca de £70 para cubrir los gastos operativos.
Sin embargo, esta no es una opinión consensuada. Muchos temen que un aumento sustancial de los precios pueda disuadir a los conductores, dando lugar a una guerra de precios más agresiva de la que ya existe. Actualmente, algunos talleres absorben pérdidas en las pruebas MOT para atraer nuevos clientes, una práctica que puede resultar insostenible si las tarifas aumentan demasiado.
La perspectiva del gobierno
El Departamento de Transporte (DfT) también está revisando las tarifas de ITV para vehículos más grandes (HGV, autobuses y remolques), con un aumento propuesto de alrededor del 10%. Aplicar este mismo porcentaje a las pruebas de automóviles elevaría el límite a aproximadamente £59,85.
Por qué esto es importante
El debate sobre los precios de las ITV pone de relieve la tensión entre mantener controles de seguridad de los vehículos asequibles y garantizar la viabilidad financiera de los talleres. El sistema actual incentiva el volumen sobre el margen, y algunas empresas priorizan la adquisición de clientes sobre las ganancias en cada prueba.
La IGA cree que se necesita un marco más justo, uno que reconozca los verdaderos costos de las pruebas. Pero aumentar demasiado los precios corre el riesgo de alejar a los clientes de los talleres legítimos y dirigirlos hacia alternativas no reguladas.
El resultado de esta revisión probablemente dará forma al futuro de las pruebas MOT en el Reino Unido, equilibrando la asequibilidad con la sostenibilidad para las empresas.
